El nuevo pedido de desafuero de la senadora nacional Cristina Fernández, realizado ayer por el juez Claudio Bonadio al elevar a juicio el caso de “los cuadernos de las coimas”, no prosperará. El jefe de la bancada peronista, Carlos Caserio, adelantó que no aprobarán la quita de los fueros, mientras que Miguel Ángel Pichetto, compañero de fórmula de Mauricio Macri, ratificó a través de su vocero su posición de que la prisión preventiva es “excepcionalísima en la etapa de instrucción”, por lo que no procede la quita de fueros. Así, la alianza oficialista tampoco tendría intención de llevar el tema al recinto, al menos en lo inmediato.
Respecto de la integración y antecendentes del Tribunal Oral Federal 7, sorteado ayer para llevar adelante el proceso, tiene apenas dos años de vida y menos de 12 meses con su conformación actual. Lo integran Enrique Méndez Signori, Fernando Canero y Germán Andrés Castelli. Ninguno de los tres tiene antecedentes en Comodoro Py. “Todavía no están contaminados”, graficó otro viejo conocedor de los pasillos de los tribunales de Retiro.
Por el pedido de Bonadío, revivió la inquietud en la clase política respecto de que, si llegara a consagrarse como vicepresidenta en octubre mantendrá fueros que le eviten ir a la cárcel, en caso de reciba condenas futuras. “Tiene fueros, según la ley”, resaltó el abogado constitucionalista Andrés Gil Domínguez. (Infobae/Perfil)